Pese a que lleva días en un tour mediático tratando de desmentir el hecho de que decenas de personas han muerto en Puerto Rico por circunstancias relacionadas al huracán María y que buena parte de ellos se acumularon en las morgues de los 69 hospitales de la Isla, el Secretario de Seguridad Pública de Puerto Rico, Héctor Pesquera, reconoció en entrevista con el Centro de Periodismo Investigativo (CPI) que entiende que las víctimas fatales del desastre son más de las 16 que el gobierno ha contabilizado oficialmente hasta el momento.
Al día de hoy además hay 30 desaparecidos reportados a la Policía de Puerto Rico.
“[Y]o entiendo que aquí hay más muertos, pero lo que no tengo es reportes que me digan [por ejemplo] en Mayagüez se murieron ocho porque no tenían oxígeno, en San Pablo se murieron cuatro porque no recibieron diálisis”, sostuvo. A la vez, señaló que se traerían 10 vagones-morgue federales para reforzar con 360 espacios adicionales para cadáveres la capacidad de 295 que tiene el Instituto de Ciencias Forenses (ICF). Asimismo, se encaminan hacia la Isla 41 patólogos forenses del Departamento de Salud federal para brindar apoyo a la sobrecargada operación, indicó.
El CPI encontró que el área de recibo y despacho de cadáveres del ICF en dónde ubican ya varios de esos vagones ha sido militarizada con tanques y efectivos de la Unidad de Asuntos Mortuorios de la Reserva de los Estados Unidos.
Pesquera, quien se mostró a la defensiva en sus respuestas sobre el tema, también aceptó que aún hay lugares incomunicados, y que es posible que más gente haya muerto en esos lugares y que el gobierno aún no lo sepa. Igualmente reconoció que pueden haber víctimas entre los pacientes que quedaron sin servicios de sostenimiento ya que el 70% de los hospitales tuvieron que cerrar por el impacto inmediato de María.
“Absolutamente de acuerdo”, dijo en respuesta a las afirmaciones del CPI.
Tras investigar con fuentes de nueve hospitales, policías y alcaldes, el CPI reveló la semana pasada que la cifra oficial de muertes por el huracán María estaba errada y que había cuando menos varias decenas de víctimas adicionales, posiblemente centenares. Las fuentes indicaron que las morgues de los hospitales consultados estaban llenas a capacidad, información que fue confirmada por el secretario de Salud, Rafael Rodríguez Mercado, quien indicó además que solo en tres hospitales del área oeste le habían notificado de siete víctimas adicionales y que le hablaron de que personas habían enterrado familiares en fosas comunes ante la imposibilidad de comunicación y transportación por el impacto de María. Después de esa entrevista al CPI, Rodríguez Mercado dejó de hacer declaraciones públicas sobre el tema y su portavoz, Peter Quiñones, dijo que todas las declaraciones las estaría haciendo el secretario de la Gobernación, Ramón Rosario.
Pesquera por su parte dijo el viernes que reunió a los ejecutivos de los hospitales, ante la preocupación generada por las informaciones reveladas por el CPI, y que todos le dijeron no había acumulación de cadáveres en sus morgues. Sin embargo, ese mismo día fuentes en dos hospitales, Doctor´s Hospital y el Hospital de Veteranos, informaron a este medio que militares se habían presentado en sus instituciones para remover cadáveres. En Veteranos, por ejemplo, había 26 muertos.
Al preguntársele a Pesquera por qué a casi dos semanas del huracán y tras múltiples informaciones de víctimas adicionales el gobierno insiste en mantener la cifra de muertos en 16, indicó que no han agregado víctimas adicionales a la lista porque aún no han comenzando a fluir los certificados de defunción de los decesos de esos días en Puerto Rico ni se ha podido analizar la información para determinar cuáles son muertes naturales regulares y cuáles son muertes que tienen que ver con circunstancias relacionadas a la emergencia.
“Yo no estoy diciendo que no ha ocurrido, yo estoy diciendo que nosotros solamente podemos certificar lo que sabemos. Cuando esa información venga aquí entonces la validaremos. Yo no voy a esconder ninguna cifra. Yo no voy a esconder ningún dato”, aseguró.
Lo cierto es que el sistema de registro de fallecimientos colapsó por completo, como tantos otros servicios y sectores en Puerto Rico, por el paso de María y sin dichos certificados de defunción los cadáveres no podían ser sacados de las morgues de los hospitales.
El secretario Rodríguez Mercado declaró al CPI el lunes de la semana pasada que ese mismo día habían comenzado a trabajar algunos de los empleados de dicho servicio para comenzar a descongestionar las morgues de los hospitales. El viernes, una fuente del CPI indicó que solo tenían 22 de las 42 oficinas del Registro Demográfico abiertas y certificando los difuntos manualmente porque como casi todo el país aún no tenían electricidad ni sistemas de computadoras, y tienen empleados que han perdido sus casas y otros aún incomunicados. Según estimó, la semana pasada certificaron más de 250 defunciones.
Ahora corresponde analizar cuántas de estas muertes estuvieron relacionadas de algún modo a la emergencia del huracán María y cuántas fueron muertes naturales regulares. La forma en que se definirán las muertes por la emergencia aún no está clara, aceptó Pesquera en la entrevista.
Cuando se le preguntó cómo lo hará, se quedó pensando y le pidió a este medio un ejemplo. Al darle el ejemplo del padre del ex alcalde de Lajas, Leovigildo Cotté, quien murió en un refugio por falta de oxígeno y quien aún no está en las cifras oficiales, dijo que entiende que ese contaría como una víctima del huracán. Sobre cuándo se sabrá la cifra real de fallecimientos relacionadas al evento, Pesquera no quiso estimar, pero anticipó que el proceso de análisis tomará mucho tiempo, posiblemente meses.
Además, al problema del Registro Demográfico se agrega el retraso en el despacho de los cadáveres porque los transportistas funerarios, también afectados por el desastre, no han podido recoger los cuerpos por la falta de gasolina y de movilidad.
Entretanto, familiares de personas con las que aún no han podido tener comunicación siguen acudiendo desesperados a la radio y a las redes sociales en un intento por saber de sus seres queridos. El gobierno aún no ha puesto en función algún sistema para tratar de comunicar a estas personas ni para tratar de parear dichos nombres con los fallecidos que se vayan certificando.
Pesquera indicó que la instrucción a los alcaldes es que ellos son los que más cerca están de los ciudadanos y que son los que deben de recoger dicha información. A los ciudadanos que tengan familiares aún desaparecidos los instó a acudir a su Alcaldía o a su cuartel de la Policía más cercano a reportarlo.
Para este lunes, la Policía tenía reportados 29 desaparecidos reportados en las regiones policiacas de San Juan, Arecibo, Caguas, Carolina, Utuado, Ponce y Mayagüez.